/ domingo 11 de marzo de 2018

La niña de papá…

El Muro

En cuestiones de problemática social, inventarse un villano favorito es fantástico porque canaliza rápidamente todas las frustraciones y genera la sensación de -tras el desahogo- haber cumplido un deber cívico, lo cual evita la flojera de pensar en soluciones.

El gobernador de Baja California, poco habilidoso para la comunicación oral, ha sido criticado por haber supuestamente asegurado que los crímenes de mujeres son responsabilidad de ellas mismas. He visto el video de la entrevista muchas veces, tantas como para no encontrar una correlación entre lo dicho por la autoridad y el sesgo que ha tomado.

Seguido de eso, llegaron los oportunistas deseosos de su pequeña de dosis de popularidad, a escribir sus simplonas -pero eso sí, muy populares- reflexiones, disfrazadas de análisis sesudos, haciendo leña del tronco en el suelo.

Mi problema con todo lo anterior es que sumarte a una causa por el lado más sencillo, el de criticar al criticado, no abona a la solución. Entre más averiguo, más claro me queda que el problema de la mujer inicia en el hogar.

En anteriores colaboraciones abordé el tópico de la inequidad desde diversas aristas, siendo el comportamiento cerebral y el evolutivo, algunas de ellas. Hoy toca el turno de la relación entre el papá y su niña, así que ojo con lo que sigue porque le puede ayudar: En “Child gender influences paternal behavior, language and brain function”, los responsables de la investigación destacan que los papás utilizan formas comunicativas diferentes con su hija y con su hijo, aunque lo nieguen. A la nena le cantan, le hablan más de su cuerpo, sobre compromiso, empatía, la enseñan a ser analítica, pero también abordan el tema de la tristeza. Con los niños usan juegos rudos, pero lo más impactante: Utilizan muchas veces palabras para alentar el logro de metas.

Pero son las consecuencias las que llaman la atención: Con estos mensajes en su mente, a las niñas les alcanza para ser muy exitosas en el mundo escolar, algo que cualquier docente desde primaria hasta Universidad puede corroborar (son más competentes, ordenadas, diligentes, se esfuerzan más por algo, son disciplinadas). Pero conforme crecen, llega el momento en que entienden que parte de su rol condicionado desde el hogar, es ponerse al servicio de alguien, mientras que a los hombres los juegos de “luchitas” junto a los mensajes alentadores, les facilitaron el camino para la adaptación social a un mundo de machos.

Por favor, no vea lo anterior como palabra divina, sino como una serie de elementos que sí debería tomar en cuenta, sobre todo si está en proceso de crianza de niños pequeños. Ahora que si sus hijos son grandes, debe saber que nunca es tarde para la recuperación, solo que este trabajo debe hacerse también en las escuelas.

Un servidor ha dialogado con padres de estudiantes universitarios durante los últimos 3 años para plantear esta realidad, pero sobre todo para trabajar en equipo; pero claro, todo esto no es popular como las marchas de protesta, ni como los mensajes descalificadores, aunque sí esté abonando a la solución.

vicmarcen09@gmail.com

El Muro

En cuestiones de problemática social, inventarse un villano favorito es fantástico porque canaliza rápidamente todas las frustraciones y genera la sensación de -tras el desahogo- haber cumplido un deber cívico, lo cual evita la flojera de pensar en soluciones.

El gobernador de Baja California, poco habilidoso para la comunicación oral, ha sido criticado por haber supuestamente asegurado que los crímenes de mujeres son responsabilidad de ellas mismas. He visto el video de la entrevista muchas veces, tantas como para no encontrar una correlación entre lo dicho por la autoridad y el sesgo que ha tomado.

Seguido de eso, llegaron los oportunistas deseosos de su pequeña de dosis de popularidad, a escribir sus simplonas -pero eso sí, muy populares- reflexiones, disfrazadas de análisis sesudos, haciendo leña del tronco en el suelo.

Mi problema con todo lo anterior es que sumarte a una causa por el lado más sencillo, el de criticar al criticado, no abona a la solución. Entre más averiguo, más claro me queda que el problema de la mujer inicia en el hogar.

En anteriores colaboraciones abordé el tópico de la inequidad desde diversas aristas, siendo el comportamiento cerebral y el evolutivo, algunas de ellas. Hoy toca el turno de la relación entre el papá y su niña, así que ojo con lo que sigue porque le puede ayudar: En “Child gender influences paternal behavior, language and brain function”, los responsables de la investigación destacan que los papás utilizan formas comunicativas diferentes con su hija y con su hijo, aunque lo nieguen. A la nena le cantan, le hablan más de su cuerpo, sobre compromiso, empatía, la enseñan a ser analítica, pero también abordan el tema de la tristeza. Con los niños usan juegos rudos, pero lo más impactante: Utilizan muchas veces palabras para alentar el logro de metas.

Pero son las consecuencias las que llaman la atención: Con estos mensajes en su mente, a las niñas les alcanza para ser muy exitosas en el mundo escolar, algo que cualquier docente desde primaria hasta Universidad puede corroborar (son más competentes, ordenadas, diligentes, se esfuerzan más por algo, son disciplinadas). Pero conforme crecen, llega el momento en que entienden que parte de su rol condicionado desde el hogar, es ponerse al servicio de alguien, mientras que a los hombres los juegos de “luchitas” junto a los mensajes alentadores, les facilitaron el camino para la adaptación social a un mundo de machos.

Por favor, no vea lo anterior como palabra divina, sino como una serie de elementos que sí debería tomar en cuenta, sobre todo si está en proceso de crianza de niños pequeños. Ahora que si sus hijos son grandes, debe saber que nunca es tarde para la recuperación, solo que este trabajo debe hacerse también en las escuelas.

Un servidor ha dialogado con padres de estudiantes universitarios durante los últimos 3 años para plantear esta realidad, pero sobre todo para trabajar en equipo; pero claro, todo esto no es popular como las marchas de protesta, ni como los mensajes descalificadores, aunque sí esté abonando a la solución.

vicmarcen09@gmail.com